El cromo desempeña un papel crucial en varias aplicaciones industriales y biológicas debido a su versatilidad química y sus propiedades únicas. Por eso, una de las preguntas más habituales que realizan los técnicos de los servicios de Prevención a través del área de asesoramiento del laboratorio de APA es cómo diferenciar el cromo (total) y los compuestos de Cromo (VI).

El cromo elemental, un elemento metálico representado por el símbolo Cr en la tabla periódica, se encuentra de manera natural en la corteza terrestre, siendo parte integral de compuestos, siendo el mineral cromita el más destacado entre ellos. La presencia del cromo se manifiesta a través de diversos compuestos que exhiben distintos estados de oxidación. Entre los estados de valencia más significativos se encuentran el II (cromosos), el III (crómicos) y el VI (cromatos), cada uno con propiedades y características específicas.

La importancia de los compuestos de cromo hexavalente en la industria

Los compuestos hexavalentes (VI), a excepción de trazas presentes en minerales, no se encuentran naturalmente en el entorno, sino que se generan a partir del cromo trivalente durante los procesos industriales de producción de cromo. Entre los compuestos de cromo hexavalente se incluyen cromatos y dicromatos, presentes en una amplia variedad de compuestos, muchos de los cuales son vitales en la industria.

Estos compuestos desempeñan un papel crucial en la fabricación de aleaciones de ferrocromo y cromo metálico, así como en la producción y soldadura de aceros inoxidables. Además, se utilizan en procesos de acabado de metales, como el cromado con ácido crómico. Es importante destacar que el cromo VI está clasificado como cancerígeno, añadiendo una dimensión significativa a sus aplicaciones industriales y resaltando la importancia de manejarlo de manera cuidadosa y controlada.

¿Qué factores se deben tener en cuenta?

Al evaluar este agente, es esencial considerar que existen valores límite ambientales de exposición diaria (VLA-ED) específicos para el Cromo VI en comparación con cualquier otra forma de cromo.

Espectroscopía ICP-OES y Cromatografía Iónica/Ultravioleta-Vis

Al realizar la toma de muestras, es crucial tener en consideración las dos técnicas de análisis disponibles: la Espectroscopía ICP-OES y la Cromatografía Iónica/Ultravioleta-Vis. Utilizando el equipo de ICP-OES, los resultados proporcionados corresponden al cromo total, sin hacer distinciones en su estado de oxidación.

Por otro lado, la Cromatografía Iónica con detector de Ultravioleta-Vis permite analizar exclusivamente el cromo hexavalente (VI).

Es fundamental destacar que cada toma de muestra debe realizarse en su soporte específico, ya que ambos ensayos implican procesos distintos y no pueden ser analizados utilizando el mismo filtro. No olvide consultar la Guía de Toma de Muestras si necesita precisiones sobre el soporte a utilizar.

En APA trabajamos con todo tipo de empresas y sectores, adaptándonos a las necesidades de cada cliente y entorno laboral.

Además, te asesoramos durante todo el proceso y te ofrecemos los resultados de los análisis en un plazo mínimo, con nuestro servicio de análisis exprés.

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